Delirios de grandeza
Me gustaría ser viento para galopar entre tus palabras,
el silencio callaría con el palpitar de la noche,
pero para qué ser viento que navega,
y empuja las alas de un velero,
pudiendo ser mejor una palabra tuya
que muere en ese viento, se despide con el susurrar entre dientes como el mejor de los regalos,
moriría por morir como mueren esos versos,
en tu boca mientras desciende por el valle de tu pecho,
ningún poeta podría jamás explicar lo que provoca tu presencía,
no hay palabras que se pierdan en el aire
para el despertar de tu sueño.
el silencio callaría con el palpitar de la noche,
pero para qué ser viento que navega,
y empuja las alas de un velero,
pudiendo ser mejor una palabra tuya
que muere en ese viento, se despide con el susurrar entre dientes como el mejor de los regalos,
moriría por morir como mueren esos versos,
en tu boca mientras desciende por el valle de tu pecho,
ningún poeta podría jamás explicar lo que provoca tu presencía,
no hay palabras que se pierdan en el aire
para el despertar de tu sueño.